Texto de Ibirico publicado en Amano 3 ("Cuaderno Inista", 1996)
No quisiera cuestionar la afirmación de mi estimado colega Inista, Bertozzi, sobre el origen de la vanguardia, que él sitúa a partir de Baudelaire, y que también comparto, pero sí quisiera mencionar a su ilustre compatriota Leopardi (1798-1837), gran poeta del "pesimismo", que quizás se anticipó, por vía más bien intelectual, a su coetáneo Baudelaire, en la convicción de que el bien, la verdad, la belleza, el romanticismo y todo lo demás, ya pertenecían al pasado...
Sin embargo, este último (Baudelaire), con esa intuición que le caracteriza, comprende que un gran cambio se avecina, y... está dispuesto a dar el primer paso, ser el héroe de la modernidad...
Después vendrían los poetas que todos conocemos y admiramos: Verlaine, Rimbaud, Germain Nouveau (quien renuncia a todo, incluso a su propio nombre, y se pone a mendigar...) etc...
Lo cual demuestra que los movimientos intelectuales, siempre o casi siempre, están vinculados a personalidades notorias dentro de los mismos: Picasso en pintura, Baudelaire en el caso que nos ocupa, etc... etc...
Y... saltándonos varias corrientes e ismos, tanto pictóricas como poéticas, y que tienen nexos comunes (surrealismo, futurismo, dadaísmo, letrísmo ... ), llegamos al INISMO...
Resulta prácticamente imposible entender el INISMO, si desconocemos los principios básicos de los distintos movimientos que lo precedieron.
Podríamos decir que el INISMO es, hasta cierto punto, una síntesis concreto-letrista de todos ellos.
El INISMO o "Código Universal Infinito" (Internationale Novatrice Infinitesimale, INI en italiano, por favor, no confundir con nuestro Instituto Nacional de Industria...), hay que rastrearlo en su origen, en el Futurismo, y en mucha menor medida, en el Dadaísmo.
Del Futurismo, los Inistas tomaron el gusto por el movimiento, así como una idea global de las artes.
De la poesía concreta, creada por el Grupo Brasileño Noiagandes, se tomó el estudio del lenguaje, desde sus elementos matéricos, así como el uso de los espacios en blanco.
La Segunda Guerra Mundial acabó con las vanguardias. En 1945, Isidore Isou, crea el Letrismo en París, intentando llenar con él el vacío existente tras la guerra. Este último entró pronto en un callejón sin salida, al llevar el Grafismo a sus últimas consecuencias, creando unos códigos sólo inteligibles para iniciados.
Ante el rumbo que tomaba el LETRISMO, algunos poetas europeos de diferentes paises, entre ellos España, intentaron hallar nuevos caminos poéticos.
Comprendimos que en vez de cerrar la Poesía, había que abrirla, superar las barreras estilísticas, lingüísticas y culturales, buscando una nueva fórmula que posibilitara un lenguaje más universal.
De esta forma se creó en 1984 KOINE TALLER 3 en Madrid (España). Definimos la nueva poesía como un Código Universal Infinito (C.U.I.).
Algo parecido ocurrió en París en 1980, al crear varios poetas italianos y franceses la INTERNATIONALE NOVATRICE INFINITESIMALE (I.N.I.) de la cual deriva el término INISMO.
A pesar de la confluencia de las dos corrientes mayoritarias Inistas, la española se diferencia de la ítalo-francesa, heredada del FUTURISMO.
Y quisiera terminar con unas preciosas líneas de Bertozzi: "Nosotros (los Inistas), a su vez, al inicio de una época más vasta, dedicamos las primeras Olimpiadas del sonido, del color, del perfume de la creación, a todos ustedes, y sobre todo, a los que han cumplido apenas once años..."
Sin embargo, este último (Baudelaire), con esa intuición que le caracteriza, comprende que un gran cambio se avecina, y... está dispuesto a dar el primer paso, ser el héroe de la modernidad...
Después vendrían los poetas que todos conocemos y admiramos: Verlaine, Rimbaud, Germain Nouveau (quien renuncia a todo, incluso a su propio nombre, y se pone a mendigar...) etc...
Lo cual demuestra que los movimientos intelectuales, siempre o casi siempre, están vinculados a personalidades notorias dentro de los mismos: Picasso en pintura, Baudelaire en el caso que nos ocupa, etc... etc...
Y... saltándonos varias corrientes e ismos, tanto pictóricas como poéticas, y que tienen nexos comunes (surrealismo, futurismo, dadaísmo, letrísmo ... ), llegamos al INISMO...
Resulta prácticamente imposible entender el INISMO, si desconocemos los principios básicos de los distintos movimientos que lo precedieron.
Podríamos decir que el INISMO es, hasta cierto punto, una síntesis concreto-letrista de todos ellos.
El INISMO o "Código Universal Infinito" (Internationale Novatrice Infinitesimale, INI en italiano, por favor, no confundir con nuestro Instituto Nacional de Industria...), hay que rastrearlo en su origen, en el Futurismo, y en mucha menor medida, en el Dadaísmo.
Del Futurismo, los Inistas tomaron el gusto por el movimiento, así como una idea global de las artes.
De la poesía concreta, creada por el Grupo Brasileño Noiagandes, se tomó el estudio del lenguaje, desde sus elementos matéricos, así como el uso de los espacios en blanco.
La Segunda Guerra Mundial acabó con las vanguardias. En 1945, Isidore Isou, crea el Letrismo en París, intentando llenar con él el vacío existente tras la guerra. Este último entró pronto en un callejón sin salida, al llevar el Grafismo a sus últimas consecuencias, creando unos códigos sólo inteligibles para iniciados.
Ante el rumbo que tomaba el LETRISMO, algunos poetas europeos de diferentes paises, entre ellos España, intentaron hallar nuevos caminos poéticos.
Comprendimos que en vez de cerrar la Poesía, había que abrirla, superar las barreras estilísticas, lingüísticas y culturales, buscando una nueva fórmula que posibilitara un lenguaje más universal.
De esta forma se creó en 1984 KOINE TALLER 3 en Madrid (España). Definimos la nueva poesía como un Código Universal Infinito (C.U.I.).
Algo parecido ocurrió en París en 1980, al crear varios poetas italianos y franceses la INTERNATIONALE NOVATRICE INFINITESIMALE (I.N.I.) de la cual deriva el término INISMO.
A pesar de la confluencia de las dos corrientes mayoritarias Inistas, la española se diferencia de la ítalo-francesa, heredada del FUTURISMO.
Y quisiera terminar con unas preciosas líneas de Bertozzi: "Nosotros (los Inistas), a su vez, al inicio de una época más vasta, dedicamos las primeras Olimpiadas del sonido, del color, del perfume de la creación, a todos ustedes, y sobre todo, a los que han cumplido apenas once años..."
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